El encuentro celebrado el pasado fin de semana en la sede de la UIMP en Cuenca contó con científicos del CSIC que lideran equipos de trabajo en diferentes ámbitos, como el desarrollo de vacunas, de sistemas de detección o de vigilancia de variantes genéticas, así como otros investigadores que han trabajado en tecnologías ya existentes para darles una nueva función y aplicarlas al control de la pandemia.
En una mesa de debate entre farmacéuticos comunitarios de diversas zonas de Europa, Portugal, Francia, Inglaterra y Galicia, comprobamos cómo la pandemia ha afectado a la farmacia comunitaria en sus países. Qué cambios se aplicaron en las fases más agudas y qué nuevos servicios empezaron a llevarse a cabo, muchos de ellos mantenidos a día de hoy. Lo que demostró el poder de la farmacia para adaptarse a unas nuevas y duras condiciones de trabajo ofreciendo de este modo una cartera de servicios más amplia y profesional a toda la población.
La última parte del curso se complementó con expertos que han desarrollado su labor durante esta pandemia en medios de comunicación, analizando la inteligencia de datos y la predicción de riesgos del comportamiento, o apareciendo redes sociales y en programas de temática variada en diversos medios de comunicación con el objetivo de transmitir información veraz a la población.