24/09/2017
Provincia

"Nuestro principal problema en la provincia son las 50 farmacias con viabilidad económica comprometida"

Entrevista del domingo con Luz Moya Plaza, vicepresidenta del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Cuenca

Vicepresidenta del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Cuenca Luz Moya Plaza. Fotos: Esteban de Dios

Luz Moya Plaza es una profunda conocedora de la realidad que rodea a los profesionales de farmacia, una de las profesiones que gozan de una especial aceptación ya que, además de prestar un servicio sanitario, cumplen una función social de gran relevancia en un gran número de municipios de nuestra provincia. Como titular de un establecimiento farmacéutico en Carboneras de Guadazón, conoce de primera mano la realidad de las farmacias en el entorno rural. Con cerca de 20 años de ejercicio es consciente de los retos, problemas y soluciones que rodean este sector. Actualmente la provincia de Cuenca tiene 176 farmacias en las que trabajan unos 260 profesionales.

¿Cuáles son los principales retos a los que se enfrenta actualmente la profesión farmacéutica?

Seguir trabajando como lo estamos haciendo desde las oficinas de farmacia comunitaria y desde el resto de las salidas profesionales. Otro de nuestros objetivos es tender una mano a la administración para incluirnos en todas las acciones encaminadas a mejorar la salud del paciente y seguir trabajando y dando valor a nuestro sistema farmacéutico, a nuestra extensa red de farmacias que, a día de hoy, es accesible para prácticamente todos los pacientes. El 99% de la población tiene una farmacia cercana a la que acudir con un profesional formado que le atiende sin necesidad de listas de espera.

¿Y los problemas más relevantes que afronta el sector?

Tenemos como un problema muy grave las 50 farmacias VEC, de viabilidad económica comprometida. Aquellas farmacias que por estar atendiendo a núcleos muy pequeños de población tienen difícil poder subsistir. Necesitan ayudas y apoyo. Son profesionales que contribuyen decisivamente en la labor que hacemos los farmacéuticos pero lo tienen mucho más complicado.

La escasa densidad demográfica que padece la provincia de Cuenca, que condiciona negativamente la prestación de otros servicios, parece que también penaliza a las farmacias.

Efectivamente, porque es difícil desplazarte a otra localidad. Hay poca población, muy repartida y de edad avanzada. El farmacéutico, en esos casos, es una figura muy importante porque los vecinos de estas localidades tienen a un profesional que les está ateniendo sanitariamente. Muchas veces es el único profesional sanitario que reside en estas poblaciones. Y ayudas tenemos pocas. El Plan de Ordenación Farmacéutica está en elaboración y se tratará de mejorar esta situación para que no vuelvan a aparecer más farmacias con dificultades para continuar con su actividad.

Este lunes se conmemora el Día Mundial del Farmacéutico. ¿Os habéis volcado en su celebración más que en ediciones anteriores?

Sí. Esta vez hemos intentado conmemorar este acto más de lo que hemos hecho otros años. Hemos preparado actividades para la población en general con dos partes diferenciadas: una parte de formación y otra de prestación de servicios. Nuestra intención es que las actividades organizadas sean útiles para la población y por eso hemos elegidos temas especilamente atractivos relacionados con el inicio del curso escolar, el final del verano...

¿Consideras que vuestra profesión está suficientemente valorada y reconocida?

Creemos que la visión respecto al farmacéutico está muy centrada en lo que es la farmacia comunitaria y por parte de la población, en el día a día, sí se nos valora nuestro trabajo. Pero pensamos que tenemos mucho más que aportar a la población y, en este sentido, sí nos sentimos infravalorados. Tenemos esta percepción porque estamos prerarados en muchos más ámbitos en los que podríamos colaborar con la administración por el bien del paciente y muchas veces no se cuenta con nosotros para poner en marcha determinadas campañas.

En el exterior, sin embargo, las cosas son diferentes.

Resulta digna de destacar la relevancia que tenemos a nivel mundial porque España ha sido elegida como sede, por la Federación Internacional Farmacéutica, para realizar el Congreso Mundial de 2020 en Sevilla. Es algo muy importante porque pone de relieve la visión que se tiene en el exterior del sector farmacéutico español. Estamos muy bien valorados en el exterior. De hecho, nuestro modelo farmacéutico es envidiable.